domingo, 29 de septiembre de 2019

OCTAVIO CHACON CORTA UN RABO EN SAN MIGUEL DE LA RIBERA



 
Ayer nos trasladamos a un pueblo de la provincia de Zamora, San Miguel de La Ribera, a presenciar un festival taurino que nos apetecía mucho. Es un pueblecito de poco más de trescientos habitantes, pero con una gran afición al toro. En su festividad, San Miguel, celebran encierros urbanos y un festival taurino. El novillero Álvaro de Chinchón, de la escuela Fundación "El Juli", fue el triunfador de la VIII edición del Bolsín Taurino "Tierras de Zamora", y el premio es matar un  novillo en una plaza de la provincia Zamorana. En un principio, como otros años, lo haría en Fuentesaúco, pero este año el ayuntamiento de la localidad desestimo hacer la novillada. San Miguel de La Ribera y su ayuntamiento se ofrecieron a acartelar al triunfador del bolsín, y así cumplir con lo ganado durante las pruebas.
 

Plaza de toros "La Ermita" de San Miguel de la Ribera. Medio aforo cubierto en tarde soleada y de agradable temperatura. Novillos de la ganadería de "El Carmen" 1º y 4º bien presentados y de embestidas ariscas y complicadas; y de la ganadería de Lorenzo Espioja 2º y 3º, bien presentados y de excelente juego. El segundo fue premiado con la vuelta al ruedo.

Serafín Marín; palmas.
Octavio Chacón; dos orejas y rabo.
Pepe Moral; dos orejas.
Álvaro de Chinchón; oreja.





Al matador de toros catalán Serafín Marín, le toco en suerte uno de los dos garbanzos negros del festival. El torero sobradamente contrastado, realizo una lidia de poder intentando en todo momento el lucimiento, logrando pasajes de bella factura. Los aceros se le atascaron y el premio quedo en palmas.




Octavio Chacón está en la brecha de las ferias, y eso se nota. Cabeza despejada, sentido de la lidia, colocación, terrenos, distancias... hizo todo lo necesario para que su novillo de Lorenzo Espioja, desarrollara ese manantial de cualidades que guardaba para el torero del Prado del Rey. Una faena perfectamente estructurada, con temple, gusto y empaque. Mato de estocada certera y a sus manos fueron a parar los máximos trofeos.



El torero de Los Palacios (Sevilla) Pepe Moral, se encontró con otro novillo de Espioja de gran condición y temple, al que cuajo por ambos pitones. Toreo encajado y largo el del sevillano ante las bondades de su oponente. Mato de forma certera y corto las dos orejas.



Álvaro de Chinchón pudo por fin, "cobrarse" su triunfo del Bolsín "Tierras de Zamora" aunque no fuera lo que el había soñado. Un novillo encampanado, feote y bruto fue el que le correspondió en el sorteo. Solvento la papeleta con oficio y siempre buscando el toreo. Tres pinchazos precedieron al espadazo que le dio muerte. El público reconoció su esfuerzo y le concedieron un trofeo.
Es bonito ver como en los pueblos, aunque sean pequeños, siguen con sus tradiciones y su respeto al toro. San Miguel de la Ribera lo hace y lo hace muy bien. Su coqueta placita de toros, aunque algo descuidada, es el centro neurálgico en las celebraciones de sus fiestas patronales. Un verdadero placer poder disfrutar de sus gentes y de su respeto al toro. Enhorabuena a todos sus vecinos y al ayuntamiento de la localidad de San Miguel de la Ribera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario