DEJEMOS YA DE MIRARNOS EL OMBLIGO

Qué entretenida ha estado la semana en lo que al mundo taurino se refiere. Al que le guste cotillear y malmeter, que por lo que se ve hay mayoría, se lo han pasado pipa.

 

Empezamos que Talavante lo deja después de una temporada en la que ha toreado seguramente menos de lo que se merece, por los resultados en la plaza. Es notorio que durante todo el año, "los entendidos", hablan de un boicot del empresario taurino más fuerte del momento, y a su vez anterior apoderado del torero, Toño Matilla. Lo dicen "los entendidos", ya que el torero a día de hoy no se ha pronunciado.

Harto, me imagino que más que harto de tantas habladurías de "los entendidos", Toño Matilla manda un comunicado a los medios aclarando punto por punto los motivos de la ruptura con el torero.  Acto seguido, sale en defensa del empresario, el también empresario Simón Casas, yendo un punto más adelante, dando cifras y números de las cotizaciones del torero, cosa ésta, que me parece lamentable. Lo primero, Toño Matilla no necesita defensa, lo segundo, no creo que sea de interés publico, por lo menos a mi me lo parece, los honorarios de un torero, dato que a lo mejor sí interesa a "los entendidos".

Esto se ha desmadrado, se ha ido de las manos y tiene que parar en seco, por el bien de todos y fundamentalmente de la fiesta. Lo que cobre un torero por jugarse la vida, siempre será poco, ya que la vida de una persona no tiene precio. Lo que pague un empresario a un torero, siempre será poco, porque el que se juega la vida es el que se viste de torero. Ahora bien, un torero, o en su nombre su apoderado, llegan a un acuerdo con el empresario que lo contrata para matar una corrida de toros, en la que el espectador, aficionado o público en general, tiene que valorar lo que en la plaza sucede, sin importarle lo más mínimo, lo que suceda en la trastienda, de no ser, claro está, que estés dentro del grupo de "los entendidos".

Yo personalmente si me pongo en el pellejo del empresario, Matilla, Chopera, Casas... sinceramente, los defiendo. El empresario monta los festejos para ganar dinero, eso está más claro que el agua, contrata a los toreros que mejor taquillaje tengan, y sobre eso, pagan. También os digo una cosa, me pongo en el pellejo de los toreros, y realmente pienso que cobran poco para lo que hacen. ¿Qué trabajador está contento con el sueldo que le paga su jefe?. ¿Qué trabajador no querría cobrar más de lo que le paga su jefe?.

Yo lo que creo es que nos deberíamos de preocupar todos, y digo todos, empresarios, toreros, ganaderos, incluso "los entendidos", de remar  para el mismo lado. De dar un espectáculo digno e interesante que lleve a la gente a las plazas de toros. Que vuelva a ser la tauromaquia un referente como en los años 80-90, en los que había variedad de encastes, de conceptos y carteles. Ese es el verdadero afán que tendríamos que tener todos, incluso "los entendidos", estos son los empeñados en colocarse exclusivas siempre con las miserias del vecino. Todos tenemos que hacer una cura de humildad y defender lo que realmente nos interesa; si es que realmente nos interesa.