Soy un aficionado más de la fiesta de los toros, si queréis
un buen aficionado, pero sin más. No vivo de esto, aunque si me gustaría. En
mi infancia se me paso por la cabeza ser torero, pero enseguida me di cuenta
que no tenía el valor suficiente para comenzar esta difícil andadura
profesional, no obstante, cada vez que tengo ocasión le pego cuatro muletazos a
una becerra y me quedo más ancho que largo. También soy fotógrafo taurino freelance,
y tengo un blog, en el que intento comentar todo lo relacionado con el mundo
del toro desde mis vivencias, tentaderos, ganaderías, festejos, entrevistas...
Esto es lo que soy yo dentro del enorme mundo taurino, un simple
grano de arena en una playa, algo insignificante. Pero ya estoy harto. Estoy harto de tanta falta de respeto, de tanto ataque, de tanto sinvergüenza y de
tanta pasividad.
Este es un espectáculo legal, que paga sus impuestos, que
genera muchísimos puestos de trabajo, que genera mucho movimiento de dinero en
todas las localidades en las que se celebran espectáculos taurinos... Ya está
bien. Ya está bien señores políticos de usar la baza de los toros como
propaganda electoral, ya está bien de ataques, ya está bien de la falta de
respeto que muestran a un colectivo que no se mete con nadie, que es un espectáculo
de masas, sin subvencionar por nadie, en fin, que ya está bien.
No sé quien sería el adecuado para hablar en serio con la máxima
autoridad del país, figuras del toreo, figuras de la prensa especializada,
figuras de los ganaderos, o un conjunto de todos, pero hay que hacerlo ya.
Hablar no sé si con el presidente del gobierno, o incluso con Su Majestad, pero
esto hay que pararlo.
Nos estamos quedando todos como que no pasa nada, que las
manifestaciones antitaurinas son pocos pero hacen mucho ruido, que esto de los
toros sigue rodando... pero tenemos que darnos cuenta que esto va cada vez
peor, y que hay que ponerle freno. Los nuevos políticos lo están usado para
cerrar plazas de toros, para prohibir ferias, para poner trabas y zancadillas,
y aquí nadie mueve un dedo.
¿Tan difícil es que nos dejen en paz? ¿Tan difícil es blindar
este espectáculo en todo el territorio nacional?, que con esto no se obliga a
dar espectáculos taurinos, simplemente a respetarlos. ¿Tan difícil es que
tengamos unidad en defender lo que nos gusta? Yo creo que no. Es el momento de
ponernos manos a la obra, aficionados, ganaderos, toreros, empresarios, y todo
aquel que sienta algo en sus entrañas por el mundo del toro. Yo creo que es el
momento de actuar, siempre dentro del respeto y la legalidad, e incluso la
caballerosidad, que es algo muy ligado al mundo del toro. ¿Vamos p´lante?
Saludos Ignacio, la vida ha cambiado mucho, muchisimo, en los ultimos veinte años; La vida ha cambiado tanto que apenas somos capaces de reconocernos y La Fiesta, nuestra querida Fiesta, parece que anda "mendigando" un espacio donde asentarse enmedio de toda esta mudanza.
ResponderEliminarNuestra relacción para con los animales de los que nos servimos ha cambiado tambien, eso no quiere decir que ahora seamos todos vegetarianos...no, no, pero ahora en casi todas los hogares hay una "mascota", vease: animal de compañia, odio la plabra "mascota" y en una sucesión de evoluciones que nos llevan directos al esperpento, tenemos que nuestros animales de compañia son uno más de la familia y cada uno de ellos ha adquirido derechos que muchas personas ni siquiera podrian soñar...(segun en qué pais vivan) Lo cual es un error puesto que los animales no tienen obligaciones, no pueden tener derechos.
Segun un estudio de una importante cadena de supermercados dentro de un hiper un perrito tiene mucho más poder adquisitivo que un africano, hace miles de años que los perros y gatos domesticaron a los humanos como medio de supervivencia y actualmente la situación esta alcanzando su zenít.
Así pues, con todo lo anteriormente expuesto, sacamos en limpio que vivimos en una sociedad a la que le cuesta ver sentido al rito del hombre enfrentandose a la fiera, en parte los mismos taurinos ya nos cuesta reconocer como fiera a lo que sale por toriles, más bien se podria ver como "mascota", y si a todo lo demás sumamos la desverguenza de politicos veleta, el panorama es bastante sombrio.
En otro tiempo, la Fiesta era un reflejo de la dureza de la vida, hoy en dia la imagen de un gladiador no termina de verse, sobre todo en este mundo donde todo es virtual y la palabra de un hombre ya no es "una escritura notarial".
La vida ha cambiado mucho Igancio, y no sabemos a donde iremos a parar.
Ängel Magán ,agricultor de Almeria.
Tienes toda la razón.
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