lunes, 20 de julio de 2015

DAMIAN CASTAÑO DISPUESTO A CUMPLIR CON SUS COMPROMISOS




El pasado miércoles día 15, en  Las Navas del Marqués (Ávila), un toro de Baltasar Iban le propinaba a Damián Castaño  una fuerte paliza y le pegaba una cornada de diez centímetros en su muslo derecho.
 

Lo primero; ¿ Cómo se encuentra?
Bueno pues bastante bien. Con dolores y molestias, pero me imagino que será lo normal. Hoy he ido a que me quitaran el drenaje y estoy bastante dolorido.

¿Como sucedió el percance?
Pues ya me había pegado una voltereta fuerte, pero tenía que matarlo. Los festejos son pocos y hay que aprovechar las ocasiones. Me tire a matarlo con rectitud y salí prendido por el muslo derecho, que fue cuando me pego la cornada, y luego en el suelo me busco con saña dándome una fuerte paliza. Pero lo mate y le corte las orejas, que fue lo que me dejo una gran satisfacción y un buen sabor de boca pese al percance.


¿ Cuánto tiempo estima de recuperación?
Pues hombre, no lo sé. Lo que tengo claro es que el próximo festejo que tengo es el próximo sábado día 25 en Santiago de La Puebla, y a un 95% pienso estar allí. Estoy esforzándome mucho en la recuperación, con el "fisio", y yo creo que podre cumplir con mis compromisos. Ahora el más importante es el sábado el festival en Santiago de La Puebla.





¿Que más contratos tiene?
De momento el primero el festival del sábado, luego otro festival el día 2 de agosto en Manzanares El Real, después el festival de Vitigudino, y luego la corrida de toros de Guijuelo y Tafalla. Y ojala salgan mas.

Entonces usted cree estar preparado para Santiago de La Puebla; ¿Faltan cuatro días?
Lo sé y el esfuerzo está siendo grande. Yo quiero ser alguien en esta profesión y por mí no va a quedar. Esta muy difícil cerrar contratos y los que tengo los tengo que aprovechar. Por mi no va a quedar. Te vuelvo a decir lo de antes, a un 95% estaré en Santiago de La Puebla.




La afición y las ganas de ser alguien en el toro hacen de este torero casi un "superhombre", esfuerzo y dedicación para cumplir con sus compromisos apenas diez días después de una cornada, no muy grande pero si con un palizón de órdago. Ojala se de todo bien, y tanto esfuerzo tenga su recompensa.




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