Este sábado dará comienzo la cuarta edición de La Copa Chenel, con toros de las ganaderías de Javier Gallego y Salvador Domecq, para los matadores de toros Alfonso de Lima, Alejandro Marcos y Álvaro Alarcón. Certamen de corridas de toros de la Comunidad de Madrid en el que 21 toreros competirán por ser el triunfador y hacer el paseíllo el 12 de octubre en la Plaza de Toros de Las Ventas.
En esta primera corrida de toros ya tenemos acartelado a uno de “los nuestros”, uno de los tres salmantinos que participan este año, Alejandro Marcos. Un torero que, por circunstancias paso de ser un torero en boca de todos en el 2022, a no torear una sola corrida de toros en 2023.
Estar en el “banquillo” no debe de ser nada agradable, es más, yo diría que es muy desagradable. No tener nada, no ver nada en el horizonte y, aun así, seguir con la rutina de entrenamientos, de preparación física y de entrega a la profesión. También dicen que curte, que te hace duro, madurar, pensar, crecerte ante la adversidad… seguramente sea cierto, pero la verdad…
De momento, Alejandro Marcos comienza su temporada en el mes de marzo, y ya solo eso es motivo de felicidad. Sabe que es una final, que necesita entrega absoluta y compromiso sin censuras para demostrar que lo del año pasado ha sido fruto del infortunio, y que, por su condición como torero, merece estar anunciado en más corridas de toros.
Preparación física, toreo de salón, tentaderos, toros en el campo… todo el trabajo está hecho, ahora solo hace falta la suerte necesaria para que se den las circunstancias adecuadas y el torero fluya, se cree el ambiente propicio para poder expresar el toreo, y todo el trabajo realizado en el silencio de la soledad más absoluta, se vea recompensado con la obra de arte tantas y tantas veces realizada al aire en esos días de toreo de salón.
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