HASTA SIEMPRE MAESTRO
Esta mañana una de esas noticias que nunca quieres que se
produzcan, ha sacudido al mundo del toro y de la cultura como un autentico
latigazo. Nadie lo esperaba, un hombre joven y sano, y con mucha vida por
delante. José Maria Dols Abellán aparecía muerto en su finca cacereña a los 61
años de edad, palazo de los gordos.
Contigo aprendí, lo que es un muletazo entero y con clase. Aprendí
muchas cosas del toreo, solo con verte. Aprendí, que vale mas un disfrute
personal en un momento dado, que la ambición de querer agarrar todo a la vez.
Contigo aprendí, que hay que ser torero en la plaza y en la
calle. Aprendí, que de las cosas malas se sacan lecciones buenas. Aprendí que la dignidad
nunca hay que perderla…
Tener un ídolo como tu en la infancia, me permitió aprender
a respetar, a valorar, y a disfrutar de las obras de arte que ofrecías cada
tarde. Faenas memorables, Madrid, Sevilla, Albacete, tu Alicante natal,
Salamanca con un toro de Sepúlveda al que cortaste un rabo, fueron algunos de
los escenarios en los que derramaste ese, no se que innato, que hacia estremecer
a todo buen aficionado que lo presenciara.
Has sido un matador de toros en el que muchas generaciones
de toreros, incluida tu generación, se fijaban en tu forma natural de estar
delante del toro, en tu forma de expresar delante del toro, y en tu forma de
disfrutar delante del toro.
Contigo aprendí, a valorar al torero dependiendo de lo que tenía
delante. También aprendí, que las broncas y escándalos sonoros, (que también
los tuviste), también son toreros. Aprendí muchas cosas de las que se, porque
eras mi referente, porque para mi el torero con el que mas me he identificado has sido tu.
Contigo aprendí, que es la torerïa, la elegancia, la
naturalidad, el empaque, el gusto y la armonía. Aprendí, a sentir el toreo, que
no es poco.
Ahora "solo" nos dejas el recuerdo de tus gloriosas faenas,
tu herencia y orgullo en tus hijos José Mari y Manuel, que seguirán plasmando
el nombre de Manzanares en los carteles. Nos dejas tu recuerdo de hombre serio,
alegre, golfillo en ocasiones, pero torero siempre.
Gracias por lo me has enseñado, gracias por las obras de
arte que nos dejas, y como dijo Leonardo da Vinci “La belleza perece en la vida
pero es inmortal en el arte” Descanse en Paz MAESTRO.
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