martes, 7 de enero de 2014

Hasta siempre, Nicolás









Víctor Soria / Burladero.com

Había llovido durante toda la madrugada. Amanecía el día triste y desayunábamos con la noticia del fallecimiento de Nicolás Fraile, ganadero de Valdefresno. El apellido Fraile en Salamanca significa toro bravo, esencia de nuestro Campo Charro. Don Juan Luis Fraile dejó una herencia a sus cuatro hijos (Juan Luis, Nicolás, Lorenzo y Moisés) difícil de encajar en estos tiempos pero que, cada uno de los hermanos en su medida, han sabido llevar con personalidad propia hasta las más altas cotas del éxito. Nicolás decidió separarse de su hermano Lorenzo en 1992 formando su propio hierro con lo que le pertenecía de El Puerto de San Lorenzo. A partir de entonces, ha triunfado en plazas de España y Francia llevando por bandera el encaste Atanasio-Lisardo que tanta gloria dio a los criadores de bravo salmantinos. Uno de los referentes en Las Ventas en los últimos años también lidió en San Fermín 2013 como premio a una gran temporada.

La historia de la ganadería todos la conocen y poco importa un día como hoy. Es el momento de resaltar a la persona, de llorar a un señor de los que tanta falta hacen en el mundo del toro. Un ganadero humilde, amable, sabio, respetuoso, llano, discreto y con gran personalidad. Recuerdo, como si fuera hoy, la última vez que le entrevisté poco antes de la Corrida de Beneficencia del pasado año. Lidiaba como premio a las tres fantásticas corridas de la temporada 2012. Debutaba además como ganadero en la corrida más importante del panorama taurino y respiraba tranquilo porque tenía la certeza de que el propio Morante de la Puebla había apostado fuerte por sus toros después de verlos embestir en Las Ventas. La charla transcurrió en el salón de su casa con su mujer y José Enrique como invitados de excepción. Habló como siempre, de manera clara y directa. Se notaba que los ejemplares que había reseñado en el campo eran de total confianza. No obviaba que Madrid exige al máximo y sobre todo era consciente de la dificultad del evento en cuestión, lo dejó ver en frases como "Es la plaza más difícil del mundo. Pero también cuando en esa plaza sale un animal que embiste y triunfa te da algo especial que no te concede otra plaza".

Otra de las sentencias que pude escuchar de su boca fue en relación con su encaste y el momento actual del toreo, un buen resumen sin duda de la situación en que vivimos "Ha habido un momento en el que a los de arriba se les fue un poco la mano a base de torear un coto muy reducido, hasta llegar casi a matar tan solo cinco ganaderías. El público agradece abrirse a un mayor abanico de hierros. En este caso, Valdefresno es de encaste Atanasio-Lisardo, hoy día casi en vías de extinción, ya que hay pocas ganaderos que sigan apostando por esta sangre (...) Al aficionado le gusta ver faenas variadas, con comportamientos diferentes, embestidas diferentes y los de arriba han de demostrar que son capaces con todo". Siempre pensando y trabajando para el aficionado. La canallada que vino después en los corrales fue quizá el último disgusto serio de el bueno de Nicolás. No se lidiaron los toros que había reseñados en un principio y la suerte estuvo del lado de los malos de la película, los que tienen el alma negra. Por suerte, el toro pone a cada uno en su sitio.

Siempre tendremos presente a la cabeza visible de esta ganadería señera, pero hoy tenemos que dar toda la fuerza del mundo a José Enrique y Nicolás porque se quedan al mando de los dos hierros Valdefresno y Hnos. Fraile Mazas. Dos personas que han heredado las virtudes de su padre en cuanto a claridad de ideas y la virtud del trabajo diario. Estoy seguro de que sacarán adelante el reto y seguirán manteniendo el nombre de este hierro en lo más alto. Suerte para ellos y un abrazo fuerte para Nicolás allá donde esté. Los cercados de Tabera de Abajo y el Campo Charro lloran por la pérdida irreparable de uno de sus hijos predilectos. Bendito sea.

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