Se le han hecho homenajes y reconocimientos, minutos de silencio y muestras de respeto, pero yo creo que el mejor homenaje al maestro Juan José, tuvo lugar ayer en la clase magistral de la cubierta de Alba de Tormes.
Seis matadores de toros de la Escuela Taurina de Salamanca, de distintas épocas y distinta evolución en sus conceptos, pero todos, los seis, han pasado “por la mano” de Juan José y se aprecia su legado. Domingo López Chaves, Javier Castaño, Eduardo Gallo, Juan del Álamo, Damián Castaño y Alejandro Marcos remataron el año 35 de La Escuela Taurina de Salamanca homenajeando al maestro Juan José.
Lidiaron novillos de distintas ganaderías del campo charro con lleno en los tendidos de la plaza de toros de Alba de Tormes. 1º Sierro; muy noble a la par que invalido. 2º Santiago López Chaves; con un gran fondo. 3º El Collado; manso en los primeros tercios, pero cuando se quedó solo empezó a embestir. 4º Montalvo; encastado. 5º Rollanejo; noble. 6º Hermanos Mateos; muy complicado y orientado. 7º de regalo de Hermanos Mateos; brusco y complicado. El 7º de regalo lo lidiaron entre los alumnos de la escuela taurina de salamanca Ismael Martin, Jarocho y Daniel Sánchez, los cuales auxiliaron a los matadores en los otros novillos.
El corte de
las orejas lo voy a omitir, porque si es una clase magistral, no un festival,
creo yo que no tendría que haber ni tan siquiera presidente.
López Chaves fue todo caricias ante su noble oponente. Javier Castaño temple y experiencia. Eduardo Gallo siempre con gusto y empaque. Juan del Álamo todo ganas y entrega. Damián Castaño temple y empaque en los remates. Alejandro Marcos nada pudo hacer con el novillo que le tocó en suerte. Ismael Martin, Jarocho y Daniel Sánchez disfrutaron acompañando a los matadores y en la lidia del 7º. Jarocho sufrió una cornadita en el brazo sin mayores complicaciones.
Un gran broche a los 35 años de nacimiento de La Escuela Taurina de Salamanca con seis matadores de toros que han pasado por ella y la han hecho visible en el circuito taurino. Matadores de toros con distinto concepto, pero una misma base, la del maestro Juan José, que hay es nada.
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