ALEJANDRO MARCOS PRIMER AÑO CON LOS DEL CASTOREÑO

Esta tarde hemos estado con uno de los novilleros con más proyección de Salamanca, Alejandro Marcos. Desde su debut con picadores en el pasado mes de abril en la plaza de toros de Ledesma, con su compañero Alberto Escudero que también debuto con caballos, ha toreado un total de quince festejos, doce novilladas y tres festivales, por Salamanca y provincia, Gijón y dos novilladas en tierras francesas. Con el charlamos y supimos de primera mano sus impresiones en su primer año con los del castoreño.

¿Cual es su balance de su primer año con caballos?

Pues yo creo que ha sido positivo por que yo lo que quería era que me vieran, que me conocieran este año, darme a conocer entre los profesionales, crear un buen ambiente aquí en Salamanca, y luego hemos conseguido salir fuera, como a la feria de Gijón, a Francia, por la zona de Madrid… yo creo que positivo. La pega es que no ha habido un triunfo rotundo, yo que se, dos orejas en Gijón, por ejemplo, o un triunfo rotundo en Salamanca… Pero yo estoy contento, porque siempre se me ha podido ver algo y yo he podido expresar algo también.

Es un buen numero de festejos en el primer año con caballos y tal y como están las cosas. Todas las tardes a “cara de perro” ¿no?

Claro, las pocas que tienes hay que aprovecharlas, y no dejarte nada en el tintero, o por lo menos que por mi no sea. No puedes pensar en el sitio que estas ni nada, lo único que tienes que llevar en la cabeza es el triunfo, por que cada festejo es una final, y hay que dar la cara siempre y si además el animal ayuda, disfrutarlo y hacer disfrutar al publico que paga por verte.

¿Se nota mucha diferencia entre el eral y el utrero?

Si claro que se nota. Yo siempre lo he dicho, el eral es como un niño y embiste como tal, alocado o informal, y el utrero ya es un mozo que sabe lo que hace.

¿Qué le aporta Juan José, profesionalmente y personalmente?

Me aporta todo. Personalmente, tranquilidad y confianza. Estamos todo el día juntos allí en “Fuentes” y hablamos de toros, de la vida, de todo… Y profesionalmente, también me aporta todo. Yo con José Ignacio y con José Ramón he aprendido mucho, pero para mi el maestro de siempre ha sido Juan José, y lo sigue siendo. Yo aprendo todos los días algo de él, de sus conversaciones, sus consejos, las rectificaciones que me hace… aprendo mucho con el a diario.

¿Con cual festejo de 2014 se quedaría?

Pues yo creo que el de Ledesma, el día de mi debut con caballos. Y yo creo que también con el día de Salamanca, por las sensaciones que viví en el patio de cuadrillas, en el paseíllo, la salida a hombros… De todos me quedo con algo, porque en todos aprendes y evolucionas, pero yo creo que esos dos días por encima del resto.

¿Cómo plantea el 2015?

Pues torear todo los festejos que podamos, intentar entrar en las ferias, y… porque no intentar entrar en Madrid. Por los pueblos se matan novilladas muy fuertes y no tienen la misma repercusión que puedan tener las feria o Madrid. Esta temporada de 2015 va a ser de apostar e intentar dar un paso para adelante en las plazas de repercusión y de responsabilidad, que son las que te colocan en el circuito. Como te he dicho antes este año ha sido un poco de darme a conocer, 2015 va a ser el año de apostar. Hay pocas novilladas, y las que podamos matar que sean para denostar que yo quiero ser alguien en el toreo.

 

Todas las ilusiones de un novillero con muchas cualidades para ser alguien importante en esto del toro. La lucha no va a ser nada fácil por muchos motivos, y él lo sabe. Asume el reto y esta dispuesto al sacrifico y a la constancia para lograr sus objetivos que no son otros que llegar a ser figura del toreo.