"MIGUELITO" Y VALENTÍN HOYOS TOREARON DOS CINQUEÑOS.
No me va a
ser fácil explicar las sensaciones que he vivido desde el pasado jueves, cuando
me enteré que llegaba la hora de la "reaparición", de volver al
campo.
Desde el
pasado 11 de marzo, aquella tarde en Sepúlveda con mi amigo Marce, donde
disfrute muchísimo con su mayoral Ángel haciendo un reportaje de la camada, han
pasado muchas cosas. Mucha incertidumbre, miedo, tristeza, inquietud... muchas
cosas que no era capaz de asimilar con la rapidez que asimilas cosas que ya
conoces... fallecimientos a cientos, enfermos en estado muy grave,
confinamiento, esto del maldito virus
nos cogió a todos a pie cambiado.
Gracias a
Dios parece que "lo malo", sanitariamente hablando, ha pasado, ahora
queda el golpe económico en la sociedad que no va a ser pequeño. Muchos
negocios arruinados o al borde de la mendicidad, otros que no ven el día de
poder arrancar la marcha, muchos festejos taurinos, grandes ferias
suspendidas... un verdadero desastre.
El pasado sábado
llego el día soñado de mi "reaparición" en el campo bravo. Los
nervios que tenia, por mucho que os lo explique, no os lo podéis imaginar.
Volver a ver las encinas, el campo, el toro, sentir sensaciones que solo se
siente allí... Pensaba que se me había olvidado el manejo de mi Nikón, las baterías
me fallaban, se me estropeaba la tarjeta de memoria... todo saldría mal. Mucho
tiempo de inactividad y muchas horas de darle vueltas a la cabeza, llevan a
estas cosas.
Pero nada más
lejos de la realidad. Me sentí como pez en el agua. En la finca de "La
Maza" donde pasta la ganadería de Gómez de Morales, me recibieron como
siempre lo han hecho, como si se tratase de mi misma casa. Paco, el ganadero,
encantador. Mi amigo Ángel Sánchez, el mayoral de la casa, un verdadero crack.
Sergio, Laura, Saray... de verdad os lo digo que fue muy emocionante
encontrarme con tanta gente buena, y saber que el "bicho" los había
respetado...
Vamos ya a
meternos en harina. Es por desgracia, algo habitual en esta crisis que nos toca
vivir en la tauromaquia por la falta de espectáculos, la "quema" (torearlos
a puerta cerrada) de toros en el campo antes de mandarlos al matadero. Ya se
asume la perdida económica, pero por lo menos, sabes si el trabajo realizado
durante los últimos cuatro años es el correcto o no.
Miguel
Senent "Miguelito" es un novillero con picadores de Valencia, con
buen ambiente dentro del mundillo. Estaba anunciado en varias novilladas, entre
ellas en su tierra, pero dado el problema sanitario, toca esperar, sin perder
los entrenamientos y la puesta a punto para cuando todo esto comience a rodar.
Valentín
Hoyos debutó con caballos el pasado Carnaval del Toro de Ciudad Rodrigo con
toda la ilusión del mundo. La temporada se presentaba con la expectación de ser
nuevo en el escalafón y con la intención de torear el mayor número de festejos
posibles. Todo se fue al traste y ahora toca reiniciarse.
Una tarde
que me lleno de energía, me devolvió la ilusión, que aunque nunca la he perdido,
pero si se había difuminado. Una tarde de reencuentros, de abrazos de los que
duelen (aunque sanidad lo desaconseje), una tarde para volver a vivir y sentir.
Con que poco me siento feliz, o con que mucho me siento feliz. Pero de verdad;
me siento feliz de volver a sentir.
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